viernes, 3 de septiembre de 2021

De cerca: Diego Costa.


- Diego Da Silva Costa nació el 7 de octubre de 1988 en Lagarto (Brasil). Se crió jugando al fútbol por las viejas calles de esa localidad de Sao Paulo. Allí creció jugando al fútbol, y hasta los 16 años de edad no vestiría la camiseta de un equipo profesional, el primero, el Barcelona Esportivo Capela. Después ficharía por el F.C. Penafiel, de la liga portuguesa, con el que no llegó a terminar la temporada. Diego se marcharía al Sporting de Braga, equipo que le valió para llegar a la liga española en 2007, concretamente al Atlético de Madrid.

Con el conjunto colchonero realizaría la pretemporada, pero finalmente sería cedido al Real Club Celta para comenzar a desde la Liga Adelante. Diego Costa era un jugador con mucho genio, demasiado carácter que le traería bastantes problemas, pero también con una magia impresionante a la hora de tratar el cuero, goleador y competitivo.

Diego Costa celebra un gol con el Atlético.
- El Celta acababa de descender a la categoría de plata y, bajo las órdenes del técnico búlgaro Hristo Stoichkov, se procuraba un rápido regreso a la máxima categoría. El Celta reforzó muy bien la zona de ataque, pues Diego Costa se uniría a los Javi Guerrero, Guayre, Manchev, Quincy, Okkas, Canobbio y Perera. 
El equipo disponía grandes bazas en la zona de embate, pero no comenzó con buen pie el campeonato de liga, pues no ganaría en sus tres primeros partidos. El brasileño ya formaría en el once del cuadro vigués en aquella tercera jornada del 8 de septiembre de 2007: Pinto, Vara, Peña, Rubén, Agus, Jorge Larena, Núñez, Roberto Souza, Quincy, Manchev y Diego Costa. El Eibar saldría de Vigo vencedor gracias al 0-1 cosechado en tierras gallegas, pero Costa comenzaría a dejar sus primeros destellos de magia.
A raíz de su debut, seguiría contando con los diferentes técnicos que hubo en aquel curso: Stoichkov, López Caro, Antonio López y Alejandro Menéndez. Éstos tuvieron que hacerse cargo del banquillo sucesivamente, pero el prioritario objetivo de regresar a Primera cada vez resultaba más complicado.

Diego Costa realizó grandes partidos de aquellos 30 en los que participó en su única temporada con los célticos. Me viene al recuerdo el partido en El Molinón frente al Sporting de Gijón, llegando a desquiciar a la afición asturiana con sus pillerías, así como con su gran fútbol. También era capaz de adaptarse a cualquier sistema con tal de jugar:
"Me gusta ayudar al equipo, y para mi es beneficioso jugar siempre. Así que jugaré donde lo necesite el Celta. Estoy preparado para jugar en cualquier posición, donde me lo ordene el entrenador".

Y así lo hizo Diego, aunque la mejor función que desempeñaba era la de ser un creador de juego en ataque, luciendo sus filigranas y burlando a los rivales de manera exagerada, algo que no hizo mucha gracia en Vigo.

La cara de su fichaje era su clase, esa técnica, la calidad y un don especial con el esférico en los pies. Pero su cruz fue la de ser un jugador bastante polémico, ganándose el desprecio allá donde iba, hasta ganarse también el desprecio de una gran sector de la afición olívica, que entre la mala racha de resultados y la inmadurez del jugador, acabaron impacientándose.

Cinco goles marcaría con el R.C. Celta de Vigo, siendo el primero de ellos ante el C.D. Xerez en Balaídos, el 6 de octubre de 2007. También vería puerta ante el Deportivo Alavés, Eibar y Numancia por partida doble.

Su fútbol encandiló a la gente, pero no eligió un buen año como para demostrar sus malos modos, aunque también hay que decir que sólo era un niño de 19 años cuando llegó al Celta y, tanto a él como a muchos futbolistas de la misma índole, se les acaba subiendo mucho la autoestima, sin llegarse a dar cuenta de los errores cometidos.

No destacó en liga por ser un goleador en Vigo, pero sus grandes actuaciones (cuando le venía en gana) ,le hicieron ganarse el aplauso del público en más de una ocasión. Finalizada la temporada 2007\08, se acabaría el periodo de cesión de éste fabuloso atacante brasileño.
Diego regresaría a la entidad colchonera, pero sería de nuevo cedido, esta vez al Albacete Balompié. Con el conjunto manchego haría cuatro goles más que con el Celta, y seguiría mostrando su genio aunque con menos frecuencia. 

En la campaña 2009\2010, debutaría en Primera División con el Real Valladolid, donde sólo permanecería esa temporada y regresar al Atlético de Madrid, su club de origen y donde realmente destacaría como uno de los grandes delanteros de La Liga. 

Costa se nacionalizó español y disputó dos Copas del Mundo con "La Roja".


- Costa jugó para el Rayo Vallecano antes de sorprender en la Premier League con el Chelsea, para el que marcó 52 tantos en 89 partidos y celebró varios títulos oficiales, el de la liga inglesa incluso en dos ocasiones.
Con el Atlético también ganaría el campeonato liguero, así como la Copa del Rey, la UEFA Europa League y la Supercopa europea. Le falló la Champions en 2014. Recientemente fichó en su país por el Atlético Mineiro.

Diego Costa se nacionalizó española, lo que le permitió formar parte de una selección española con la que ha disputado 24 partidos e hizo 10 goles. Con "La Roja", el de Lagarto disputó los Mundiales de Brasil 2014 y Rusia 2018. Para la selección "carioca" jugó en dos ocasiones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

De cerca: Rodri Hernández.

- Ya era hora de ver levantar el Balón de Oro a un jugador de perfil defensivo, aunque Rodri es capaz de jugar en cualquier lado. En mi opin...