- Todos estaréis de acuerdo conmigo cuando me refiero a Dwight Yorke como el mejor jugador trinitense de la historia. No solo es por su altísima experiencia en la Premier League, sino por todo lo que ha conseguido como futbolista.
Puede presumir de haber levantado el trofeo de la Champions con el Manchester United, ese club al que ha defendido durante cuatro temporadas y con el que se convirtió en el máximo goleador de la Premier. Además jugó para otros equipos como el Aston Villa, Sunderland y Blackburn Rovers.
La selección de Trinidad & Tobago solamente ha participado en la Copa del Mundo en una ocasión y, como no, fue con este hombre de delantero. Sin embargo, cuesta creer que no es el máximo goleador histórico de su selección.
Yorke ganó la Champions League. |
- Dwight Eversley Yorke es un delantero centro que nos ha impresionado a todos los futboleros de mi quinta. Era un jugador muy especial, un incómodo atacante que podía desempeñarse como punta en solitario o como acompañante, de extremo derecho. En alguna ocasión se le ha visto jugar de centrocampista defensivo.
Su forma de jugar era muy explosiva. Tenía muy buen regate, sabía desmarcarse con soberbia velocidad, encarar portería y crear peligro con tremenda facilidad. Su agilidad era algo increíble, pues a veces parecía un muñeco de goma. Lo que ha logrado en su carrera, pocos trinitenses podrán emular.
Nacido en Canaan (Trinidad & Tobago) el 3 de noviembre de 1971, fue descubierto por Graham Taylor cuando el Aston Villa realizó una gira por las Islas del Caribe. Allí quedó sorprendido con el talento de Yorke, un joven delantero de diecisiete años que lideraba el ataque de un equipo de la academia de Signal Hill, con sede en Los Ángeles (Estados Unidos).
Graham le ofrecería la posibilidad de viajar a Inglaterra para realizar unas pruebas en Birmingham, algo que superaría con brillantez para ganarse un buen contrato que le permitiese asentarse en el Reino Unido. A finales de los ochenta, el joven trinitense quedaría vinculado a un Aston Villa con el que estaba a punto de experimentar sensaciones nuevas. Eso sí, primero debería seguir creciendo con el equipo reserva.
El 24 de marzo de 1990 irrumpiría en la máxima categoría inglesa, cuando todavía no se había configurado la Premier League. Dwight tendría su puesta de largo ante el Crystal Palace, ganador en su feudo por 1-0.
Ya con Atkinson, el joven delantero caribeño empezaría a ganarse el sitio en Villa Park. En poco tiempo empezaría a destacar haciendo sus primeros goles al lado de grandes profesionales como Steve Staunton, Dean Saunders o Ray Houghton. Su forma de jugar no desentonaba para nada.
En Birmingham estuvo durante una década que le sirvió para darse a conocer por el fútbol inglés. Celebró el título de la EFL Cup en 1996, aunque sus mayores logros llegarían en sus siguientes pasos con el Manchester.
Fue recibido por Alex Ferguson para apuntalar su sistema de ataque, quien contaría con "Dwighty" para convertirlo en la gran referencia de ataque. De esta manera, el trinitense se convertiría en el máximo realizador de la Premier con 18 goles.
Su primer año con los "Red Devils" fue espectacular, conquistando el torneo de la Champions League, la liga y la FA Cup. Al año siguiente mejoraría sus registros, añadiendo a sus hazañas títulos como la Copa Intercontinental y otro del campeonato liguero, el que se repetiría al año siguiente.
En el Manchester United estuvo cuatro temporadas. Hizo un buen equipo junto a los Paul Scholes, Roy Kean, Ryan Giggs y David Beckham. Él sería una estrella más en Old Trafford, donde permaneció hasta el 2002.
Tras vivir sus mejores momentos en Inglaterra, allá seguiría Yorke jugando para el Blackburn Rovers, un equipo para el que empezaría siendo el gran goleador hasta que pasó a ser descartado por Leslie Mark Hughes.
Dwight Yorke jugó con la selección trinitense en su única Copa del Mundo, en 2006. |
- Aún le quedaban años de fútbol, y quiso pasarlos en Inglaterra con el Birmingham, donde interrumpió su estancia para jugar en la liga australiana con el Sidney F.C., de donde nuevamente volvería a suelo británico.
Los últimos partidos de su carrera los jugaría con el Sunderland, al que dedicaría su último gol en la Premier. En esta competición dejó unos números de 123 goles en 375 partidos. Yorke colgó las botas tras el curso 2008\09.
Entrará en la historia por muchas cosas, pero especialmente por haber logrado la clasificación a la Copa del Mundo por vez primera en la historia de la selección de Trinidad & Tobago. Con ella jugó el Mundial de Alemania 2006, terminando su trayectoria internacional con 19 tantos en 72 partidos.
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