- De todos los campeones del mundo que se conocieron en las últimas cinco décadas, seguro que "Chancha" Larrosa es de los menos conocidos por Europa, sobre todo si nos referimos a jugadores como Diego Armando Maradona, Lionel Messi o Daniel Passarella. Junto al último, alzó la Copa del Mundo en 1978.
Nos referimos a un jugador que durante sus años como futbolista gozó de cierto prestigio, aunque no pasó de jugar en su país o por Guatemala, como miembro de Comunicaciones. A lo largo de su carrera, obtuvo éxitos con equipos como el Boca, Huracán e Independiente de Avellaneda. También pasó por Vélez Sarsfield y Argentinos Juniors.
Omar Rubén Larrosa fue un polivalente futbolista que nació el 18 de noviembre de 1947 en Lanús (Argentina). Se sabe que, retirado de este deporte, estuvo en el Departamento de Organización y Eventos de Boca Juniors.
El club "Xeneize" marcaría su niñez. Omar era un chaval inquieto que se crió en un ambiente humilde, en una familia de clase obrera. Empezaría a jugar para equipos amateurs de la ciudad de Lanús, aunque fuera de allí encontró mejores posibilidades.
Su padre no solía acompañarle a los partidos, aunque tampoco le duró mucho, pues falleció cuando Larrosa tenía doce años. Los padres de sus amigos le acercaban a las canchas y, un año después de perder a su progenitor, "Chancha" tendría la posibilidad de realizar unas pruebas con el Boca Juniors.
Solía jugar como mediocampista ofensivo, siendo capaz de moverse como extremo izquierdo o como organizador. Era un futbolista técnico y no exento de la típica bravura y dureza que se estilaba durante su época futbolística.
Llegaría el momento de alcanzar la profesionalidad, debutando para Boca en 1967, al que abandonaría dos años después, tras ser tentado por la directiva de Argentinos Juniors. Sin embargo, Larrosa no tardaría en volver a La Bombonera.
Retornaría justo a tiempo para ganar el primer título importante de su carrera deportiva, jugando a las órdenes de Alfredo Di Stéfano para alzar el trofeo liguero de 1970. Tan solo permanecería aquella temporada con Boca, ya que seguidamente se iría a Guatemala para jugar para Comunicaciones durante un año. También probaría por México, donde representó a los Tuzos del Pachuca.
Larrosa volvería a Buenos Aires para fichar por Huracán, donde alcanzaría su mejor fama siendo indiscutible para César Luis Menotti, quien años después le haría debutar como internacional y se lo llevaría al Mundial.
En el "Globito" coincidiría con otros talentosos jugadores como René Houseman, Miguel Brindisi, Alfio Basile y Jorge Carrascosa. Además de disfrutar de gran protagonismo, en 1973 volvería a conquistar la liga, pasando cuatro temporadas más en el club, del que salió para fichar por Independiente.
Aún le quedaban más éxitos por celebrar, en especial, aquella anhelada Copa del Mundo del 78. Entonces, Omar Larrosa se hallaba jugando para un Independiente con el que iba a obtener otros dos ejemplares de liga, teniendo participación completa con el técnico José Omar Pastoriza.
- Para el conjunto de Avellaneda estuvo jugando hasta principios de los ochenta, de donde saldría para afrontar el tramo final de su carrera, viviendo una breve etapa con Vélez Sársfield antes de unirse a San Lorenzo de Almagro.
Omar Larrosa ya había ganado todo lo que necesitaba para colgar sus viejas botas, Con San Lorenzo aguantaría hasta 1982, momento en el que decidiría dejar de jugar al fútbol para luego encargarse de otro tipo de tareas.
Justo a finales de los setenta, Larrosa sería convocado para vivir el que sería su única Copa del Mundo, la de Argentina 78. Nuevamente a las órdenes de Menotti, el centrocampista participaría en un par de encuentros del torneo, y la copa se quedaría en casa. En total, Larrosa jugó 11 partidos con la albiceleste.
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