¿Te acuerdas de César Sampaio?

- Tuvo la mala suerte de esquivar esos dos Mundiales en los que Brasil salió campeona, aunque su participación en el Mundial de Francia 98 fue espectacular. En él anotó 3 goles y la "Canarinha" de Mário Zagallo salió subcampeona. Sí pudo alzar los trofeos de la Copa América de Bolivia 97 y la Copa Confederaciones de ese mismo año.

Carlos César Sampaio Campos jugó para los cuatro grandes clubes de la ciudad de São Paulo: Palmeiras, Santos, Corinthians y el São Paulo F.C. Tuvo un breve paso por la Liga Española, jugando para un Deportivo de moda con el que solamente pudo ganar la Supercopa española. También pasó por la liga japonesa.

Coincidió con una época dorada para el fútbol brasileño, cuando disfrutamos de auténticos cracks como Ronaldo Nazário, Rivaldo, Romário, Cafú, Cláudio Taffarel, Roberto Carlos, Ronaldinho... La lista puede ser interminable. 

La clase de César Sampaio no desmerecía. Era un mediocentro defensivo de pura samba, un jugador con gol, buen pase, organizador y muy cumplidor. Con solo verle tocar el balón, se sabía que ahí había un genial futbolista.

Este centrocampista nació en la bella ciudad de São Paulo (Brasil), el 31 de marzo de 1968. En el Santos F.C. tuvo la gran ocasión de debutar como profesional, en 1986. Para este club jugaría durante cinco temporadas.

Ya iniciada la década de los noventa, Sampaio se marcharía al Palmeiras, con el que confirmaría su gran estado de forma cuando ya había debutado para la selección nacional. Con el "Porco", el joven centrocampista ganaría dos títulos de la liga nacional y otras dos ediciones del Campeonato Paulista.

Sampaio saldría de Brasil en 1994, para probar suerte por vez primera en Japón. Durante tres campañas jugaría para el Yokohama Flügels, donde superaría el centenar de partidos y marcaría 13 goles antes de ir al Mundial.

Tras su espectacular rendimiento en Francia 98, pero con la espina clavada de no haber podido ganar la copa, Sampaio retornaría al Palmeiras para cumplir con una breve etapa, ya a finales de la década de los noventa.

En ese año con el equipo paulista, César celebraría la Copa Libertadores de 1999, demostrando ese espectacular estado de forma que ya había lucido en el torneo mundialista. Por ello, muchos serían los clubes importantes que llamarían a su puerta. Entonces, llegaría el momento de ponerse a prueba por Europa.

En pleno cambio de milenio, el medio brasileño se comprometería con el Deportivo de La Coruña, donde iba a jugar a las órdenes de Javier Irureta, quien vio con buenos ojos su refuerzo para la medular deportivista.

En aquel "Superdepor", Sampaio coincidiría con varios compatriotas, como Mauro Silva, Donato, Emerson y Djalminha. La competencia en el centro del campo era evidente, pero César se perfilaba para ser titular. Sus primeros partidos serían como suplente, empezando por un empate de Champions ante el Panathinaikos. Poco después, tendría su debut liguero en El Sardinero, en una victoria ante el Racing por 0-3.

En el Mundial de Francia 98, César Sampaio dejó tres goles para Brasil.

- Al final se fue ganando la titularidad con Irureta, celebrando la Supercopa de España y convenciendo al espectador de Riazor. Sin embargo, su estancia en A Coruña sería efímera, puesto que en el mercado invernal se iría al Corinthians. 

Volvería a Japón, para jugar en el Kashiwa Reysol y Sanfrecce Hiroshima. En su ciudad jugaría para el São Paulo F.C. durante unos meses, yéndose a Indonesia para retirarse con el Persatuan Sepakbola Manado, en 2006.

Cerca estuvo de tocar la gloria en el Mundial de Francia 98, al perder en la final frente a la épica selección francesa de Aimé Jacquet. Aún así, Sampaio dejó tres goles en el torneo, de los 6 que hizo en sus 47 partidos como internacional. Al menos ganó la Copa América de 1997 y la Copa Confederaciones.